En los años 90 la idea de las empresas modernas era estar presentes en internet y tener una página web donde presentar los productos y servicios que ofrecían.
Internet era el nuevo medio donde “había que estar”.
Toda empresa que no estaba en la red, se consideraba que estaba fuera de juego; era el nuevo sistema de captación de clientes, de marca, de no quedarse atrás con la competencia.
Actualmente, los tiempos han cambiado. Ya nada es igual. Lo que ayer era tener un sitio web para presentarnos y no perder el tren hoy ya no vale. Hoy en día necesitas notoriedad y visibilidad, aparecer en las primeras posiciones de Google para ser vistos.
Para conseguir esto necesitas una estrategia de posicionamiento SEO.
Son muchas las empresas que desconocen los beneficios de realizar un buen posicionamiento SEO para su sitio web.
Actualmente, Internet es el primer canal de comunicación entre empresas y clientes.
Con el auge de los Smartphones el estar visible en Internet es imprescindible.
En cada segundo se producen millones de búsquedas de diferentes productos y servicios, y el no estar visible para esos cientos de miles de potenciales clientes, es perder la partida en Internet.
Si cuando el cliente realiza la búsqueda en Google, y no aparecemos, en la primera página, será como si nuestra web estuviera en un callejón oscuro y que solo aparece cuando buscamos por su nombre.
Lo que necesitamos es que nos encuentren cuando busquen algo que nosotros ofrecemos.
Si no tenemos visibilidad no existimos en Internet.
La importancia del posicionamiento SEO reside en aparecer en los primeros resultados de Google para captar a ese potencial cliente.
El SEO es necesario para nuestra empresa, para nuestro cliente y para ayudar a Google a clasificar nuestra web y determinar si es útil para que los usuarios lleguen a ella.
Sin la correcta estrategia de posicionamiento SEO, la empresa está invirtiendo, en la creación de un sitio que va a tener pocas visitas, lo que se traducirá en consecuencia en pocos usuarios y por tanto clientes.